3.9.09

por la patria y por mi honor .

.
.
hey, you've got to hide your love away.
.

.
.
.
.
fue entonces, una tarde de invierno porteño, mirando por una ventana y fumando un cigarrillo, que tuve una revelación: no volvería a escribirte. esto ya me lo había propuesto muchas veces para mis adentros (que no son tantos, sino uno solo, y a veces ni siquiera), pero ya sabe usted que la carne es débil, y yo lo soy mucho más, y que la noche debilita los corazones, y que al que madruga dios lo ayuda. por lo que nunca pude concretar mi autopromesa de no volver a escribirte. ahora tampoco sé si podré, pero quizás al plasmarla en un par de líneas en blog, la próxima vez que me vea menoscabada por el recuerdo y empañada por tu ausencia, en vez de abrir hotmail o agarrar el celular, termine tirando los dados del i-ching y concentrándome en cosas mucho más importantes. o menos, mucho menos importantes. yo ya he escrito suficiente. lo que tuve para decir, creo que lo dije en tiempo, y lo de la forma es discutible. ahora no tengo mucho más para agregar. sólo que sabés dónde estoy, y que si no me escribís es porque no te interesa saber cómo sigo. o no tenés tiempo. pero yo no creo que nadie carezca realmente de tiempo. ni siquiera bill gates. en lo que a mí respecta, dejaré que las cosas se desenvuelvan naturalmente, fluyan con la marea, se acerquen y se vuelvan a alejar de la orilla, como siempre. adoptaré la actitud más pasiva posible. yo, que siempre fui una persona detrás de un impulso. me quedaré quieta, inmóvil, al borde del camino.


es justo y necesario.

.
.
.
.

1 comentario:

  1. justa y necesaria fue, en su momento, the bill of rights. y las comunicaciones, hoy en día, sufren un colapso nervioso importante. pero vamos, chiquitina, que hay muchas formas de decir y hacer saber. y no te quedes inmóvil, que quiero que me saques a pasear.

    te quiero mucho.

    ResponderEliminar

opiniones al respecto.. o no.